En el mundo del tarot existen multitud de tiradas, casi tantas como cuestiones o planteamientos que queramos resolver. Casi tan importante son las tiradas del tarot como la concentración que mantengamos para la interpretación de las cartas.
Entre estas múltiples tiradas del tarot existentes las más sencillas son la tirada simple y la de lectura a cuatro cartas. En las tiradas de tarot simple nos pueden ayudar a conocer respuestas rápidas, simples consejos o pequeñas advertencias dependiendo si la carta cae o no de un modo inverso.
Por el contrario en la lectura a cuatro cartas, también una de las tiradas del tarot más sencillas, consisten en extraer 3 cartas del tarot, la primera de ellas se colocará en la parte izquierda y representará todo lo positivo que pueda sucedernos, la de en medio representará el origen de nuestros problemas, mientras que la tercera y última situada en el otro extremo representará los elementos negativos y adversos que tengamos.
Una vez tirada las cartas, si estas están dominadas por arcanos mayores, habrá que interpretarlos como un crecimiento interno, positivo, hacía grandes logros personales. Cuando la tirada está dominadas claramente por cartas de oros, marca evidentemente un gran momento económico o laboral, eso puede ser positivo o también negativo, ya que puede evidenciar una carencia afectiva y una preocupación hacía lo material.
Cuando los bastos hacen su presencia, la pasión también lo hace, y es que es una muestra clara de que nuestro espíritu está lleno de vitalidad y fuerza. Las copas reflejarán por el contrario momentos delicados, sobretodo en cuanto al amor, emociones y sentimientos en horas bajas.
Por último, una tirada del tarot en la que está dominada por cartas de espadas, muestra claramente situaciones tensas, confrontaciones, posibles conflictos con la pareja, en el trabajo, etc…
Las cartas reflejarán, según la tirada realizada, los momentos por los que estamos pasando, el origen y el posible desenlace de estos.