Tarotista es aquella persona que se gana la vida utilizando barajas de naipes como medio para la “adivinación” de hechos presentes, pasados o futuros, por lo que constituiría un tipo de cartomancia. El mismo está constituido por 78 cartas, que se dividen en 22 arcanos mayores, y 56 arcanos menores.
Los tarotistas han utilizado a lo largo de la historia variados diseños de naipes, aunque algunos de loas más clásicos son el de Marsella, que data de finales del siglo XVII. También es muy popular la baraja de Rider, ideada en 1910 por Arthur Edward Waite y realizado por su discípula Pamela Colman Smith, con pequeñas variaciones entre ellas.
En la actualidad, la tarea del tarotista sigue siendo muy buscada en las sociedades desarrolladas, especialmente bajo la forma de consultas personales, ya sean personales, telefónicas o por Internet. Normalmente, se suele sincretizar el tarot con otras creencias, como la numerología o la astrología. Incluso, en España el esoterismo, con esta actividad a la cabeza, mueve cientos de millones de euros al año.
Cabe destacarse, asimismo, que por esta época, las consultas hacia los tarotistas tienen que ver especialmente con la salud de los familiares, como también acerca de cuestiones sentimentales o profesionales. Si bien mucha gente asegura no creer en la tarea de estos individuos, hay otros tantos que acuden a ellos dos veces por año, de forma asidua.